martes, 1 de mayo de 2007

TONY RAFUL TODAVIA ESCRIBE BIEN

Vicente Rodríguez Nietzsche me abraza fuertemente, como si fuera un abrazo de islas, como si Puerto Rico y Santo Domingo, evocaran ese mar de solidaridad, que Hostos, Betances, Martí, Gómez, Luperón, Albizu, evocaron en la idea prístina de una confederación de patrias libres del Caribe. Vicente se inclina luego en los peldaños de la sala Ravelo del Teatro Nacional, Eduardo Brito, donde se celebra el Festival de la Poesía, y me dice que Andrés Castro Ríos murió súbitamente. Hacía apenas segundos que le había preguntado por Andrés. Me quedo absorto, ¿y cómo es posible que se haya muerto un poeta y Borinquen no se haya detenido, que las sirenas no hayan anunciado en San Juan, en Santurce, en Caguas, en Mayagüez, que se ha muerto una de las voces más altas del lirismo, del amor y del compromiso humano de toda la literatura puertorriqueña? http://www.listindiario.com.do/app/article.aspx?id=11308

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