jueves, 30 de noviembre de 2017

Un Caballero de fina estampa


 En mis 44 años he visto como se olvidan los ideales emprendedores de quienes forjaron y llevaron a cuesta el aura de colocar en el mapa EL PUEBLO OLVIDADO DE COTUI, son muchos esos personajes, pero voy en este leve instante a escribir de uno en particular un hombre con una sensibilidad humana y con la más amplia cultura que ningún cotuisano a tenido la dicha de poseer, me refiero a DON JUAN EUTIMIO JEREZ (NIÑO JEREZ), de dotes extraordinarios, músico, poeta, escritor de los más noble, lingüista; y de la más finas obras musicales para la banda de música de la Universidad Autónoma de Santo Domíngo, y otros pueblos de la República Dominicana. Tocabas 8 instrumentos, escribía y hablabas  5 idiomas, entres otras cosas más.




Por Lic. Jhovanny Gómez Reynoso

Al reflexionar sobre el contenido de este escrito, dedicado a la obra y al autor aludidos, me viene a la mente Martí (1853-1895). Me refiero a plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro, frase lapidaria en la que concreta las tres cosas que cada persona debería hacer durante su vida.

Visto de una manera superficial podríamos fácilmente concluir que la expresión se refiere a tres asuntos que encierran una relativa dificultad. Para plantar un árbol es suficiente disponer de una semilla; a redactar aprendemos rápido en la escuela y pronto somos capaces, incluso, de escribir un libro de más o menos 5 páginas; tener un hijo es inherente a la especie humana y a su capacidad reproductora.
A mis 44 años he visto como se olvidan los ideales emprendedores de quienes forjaron y llevaron a cuesta el aura de colocar en el mapa EL PUEBLO OLVIDADO DE COTUI, son muchos esos personajes, pero voy en este leve instante a escribir de uno en particular un hombre con una sensibilidad humana y con la más amplia cultura que ningún cotuisano a tenido la dicha de poseer, me refiero a DON JUAN EUTIMIO JEREZ (NIÑO JEREZ), de dotes extraordinarios, músico, poeta, escritor de los más noble, lingüista; y de la más finas obras musicales para la banda de música de la Universidad Autónoma de Santo Domíngo, y otros pueblos de la República Dominicana. Tocabas 8 instrumentos, escribía y hablabas  5 idiomas, entres otras cosas más.
 (Quizas usted amigo lector nunca escuchó este nombre por su temprana edad) y siento que las autoridades nunca se han interesado en esculpir los rostros que en verdad mi pueblo mereces que estén en los lugares públicos.
Todas las tardes, llovieras, tronaras o ventee, se dirigía a la academia de música que en ese entonces quedabas en el barrio Bawincho y después trasladada a los bomberos en la esperanza, Don Niño iba a dar el pan de la enseñanza como si fuera el ultimo día de su vida, a todo el que queria aprender un instrumentos musical; no obstante tenía la potestad de cuando el estudiantes ya tuviese dominio del instrumento lo enviabas directo a la banda de música municipal de manera probatoria para que el ilustre BARTOLOME ALEMAN, decidiera si ya habría de estar o no en la banda como parte de los músicos.
Las autoridades deberían tomar crriterios e investigar sobre personajes cotuisanos que plantaron las semillas para ver grandes laures a nivel nacional e internacional, y dotar de conocimientos a las demás generaciones, porque de este y muchos grandes hombres se sabe poco en la diaspora cotuisana.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buen tema y ojala se tome en cuenta. Un gran aporte.